Las explicaciones de Víctor Hugo Morales sobre la pauta oficial y su acercamiento a la administración Kirchner

En los últimos meses estuve trabajando mucho sobre temas de pauta publicitaria gubernamental, donde la escasez de información oficial obliga a recurrir a fuentes privadas (1, sobre Canal 9; 2, sobre TV abierta en general; 3, sobre prensa gráfica; y 4, pauta privada, no es una nota mía pero completa el panorama). Una de estas notas se enfocó en la distribución de la publicidad oficial (que canalizan la agencia Telam, la Anses y la AFIP con la supervisión de la ex Secretaría de Medios) en la TV abierta porteña. Según una de las fuentes a la que tuve acceso, el Canal 9 y especialmente aglunos de sus programas son privilegiados como destinos de la inversión publicitaria estatal. En ese grupo, mi fuente incluyó a Bajada de Línea, el envío conducido por Víctor Hugo Morales. En este post resumo las explicaciones (y arrepentimientos de sus antigüas críticas al Gobierno: «Me da mucha vergüenza haber sido parte del ejército mediático contra el gobierno») que Morales dio en varios de sus envíos (tratando de respetar lo más posible sus dichos textuales).

Como era esperable, el periodista, conductor y relator de fútbol reaccionó duramente contra los medios y periodistas que difundieron las únicas cifras que se conocen sobre cómo fue la distribución de la publicidad oficial en la televisión abierta porteña en 2010, acusó a los diarios La Nación, Clarín y Perfil de “mentir sistemáticamente” y prometió “darles pelea”.

Según las cifras publicadas el 5 de enero, Canal 9 recibió el año pasado el 67,5% (72,3 millones de pesos) de todo lo que el Estado nacional invirtió en avisos en los cinco canales de aire de Buenos Aires. De acuerdo con esa información, entre los programas beneficiados en el reparto está Bajada de Línea, el envío televisivo que Morales tiene en Canal 9, emisora propiedad del empresario mexicano Remigio Ángel González González y en cuya dirección actúa informalmente, Luis Ricardo Palacio, interventor en Canal 7 y Radio Nacional durante la presidencia de Néstor Kirchner.

La semana posterior a la publicación de esos datos, Morales se extendió largamente sobre el tema en varios de sus programas, en los que sugirió que los diarios La Nación, Clarín y Perfil montaron una campaña en su contra. Además, mezcló la elección que la revista Noticias hizo respecto de los mejores y peores periodistas de 2010, con la difusión del reparto de la publicidad oficial en TV, hizo un racconto de las medidas oficiales que, según él, lo llevaron a estar cerca de “la vereda del gobierno” e hizo un mea culpa de su apoyo al sector agropecuario durante el conflicto por la resolución 125.

Aunque ni él personalmente ni su productora GP Media comercializan el programa, Morales dio detalles de la cantidad de avisos del Estado difundidos en su ciclo. En Bajada de Línea, el periodista dio el siguiente balance: “19 programas hemos hecho hasta el de hoy, 430 publicidades en total, de las cuales 52 fueron promociones del canal, 363 de privados y 15 publicidades oficiales”. Días antes, en su programa deportivo, había hecho el desgloce de los responsables de esos spots: “Policía Federal, Fuerza Aérea, Incaa, ISER, ND Ateneo, Prosapp y Día de la Soberanía”. Curiosamente, ND Ateneo no es un organismo oficial sino un teatro propiedad del ex secretario de Medios, Enrique Albistur. Según explicó Morales, el éxito de su programa atrajo a numerosos anunciantes y llevó a Canal 9 a renovar el contrato, al menos, por los meses de verano. En esa emisión también reconoció que el único tema que acordó con Canal 9 no abordar es el de Ibope, la medidora de rating con la que el conductor parece estar enfrentado y que ubica al 9 en la tercera posición entre las señales abiertas porteñas más vistas.

En Competencia, su programa deportivo en Continental, cuando anticipó el contenido de Bajada de Línea, había prometido: «Verán qué es lo que además gano…; 200.000 pesos por mes es lo que cobran opinadores politicos que no van contra las empresas, muchos programas de cable, tal vez no todo, veran de qué no hablan. Muchos de ellos participan en las encuestas de Fontevechia [en una de las cuales Morales fue elegido «peor periodista de 2010»]. Esta entrecomillado de Morales es textual. No dice que gane 200.000 pesos, pero ese es el único número que él mencionó. Ni Morales ni GP Media (productora de Bajada de Línea) comercializan el programa, algo que realiza directamente el departamento comercial de Canal 9.

En esa emisión de Bajada de Línea, como prueba de la pluralidad del programa, se incluyeron tapes del paso por allí de los candidatos presidenciales Ricardo Alfonsín (UCR), Pino Solanas (Proyecto Sur) y Mauricio Macri (Pro), y de las preguntas incómodas que debieron responder el ministro de Economía, Amado Boudou (sobre las estadísticas del Indec) y el jefe de la CGT, Hugo Moyano (sobre su calidad de empresario además de sindicalista).

Según información difundida, parte de la enorme cantidad de dinero que recibió Canal 9 (paradójicamente, la emisora con menor número de producciones nacionales en su pantalla) fue a la cuenta de Bajada de Línea, algo que tanto GP Media como Morales negaron rotundamente cuando fueron consultados. En GP Media precisaron que es el propio Canal 9 quien realiza la comercialización del programa y que en eso se diferencia de lo que ocurre en América (donde la productora tiene en pantalla otros programas), que coproduce comercialmente los programas. “Canal 9 tiene un sistema distinto. Tiene un departamento comercial por el que pasa toda la cuestión comercial, cualquier cosa lo maneja el departamento comercial del canal. En GP cobramos por la producción televisiva y de archivo del programa”, dijo Tristán Noblia, director de contenidos de la productora de Gastón Portal, que en 2010 tuvo en el aire Resumen de los Medios (RSM) y Un Mundo Perfecto en América.

Desde que se publicó la información, el 5 de enero pasado, Morales recurrió a tres de sus cuatro programas (La Mañana, Competencia -Radio Continental-, El primer clásico -Radio Nacional- y Bajada de Línea -canal 9-) para desligarse de los fondos publicitarios con los que la administración Kirchner privilegió a Canal 9, datos que varias semanas después de haber sido difundidos no fueron desmentidos con cifras por ningún funcionario del Gobierno. A continuación, un resumen de lo explicado por Morales en la última semana, en la que fue pasando de la crítica suave al gobierno por el manejo de la publicidad ofical, al ataque descarnado contra los medios y periodistas que difundieron información actualizada sobre ese reparto.

9 de enero. “Lo que han mentido esta semana supera sus propios récords”
Después de hablar en la radio, Morales volvió a referirse al tema en Bajada de Línea. Esta vez, acusó a los diarios La Nación, Clarín y Perfil de estar de acuerdo para atacarlo, aunque puso énfasis en señalar a Magneto [Héctor, CEO del Grupo Clarín] como el autor principal de la jugada. “Respecto a Magneto, me siento como aquel cabo de la policía de Chicago que se sentía honrado porque Al Capone había mandado a matarlo», afirmó. Según Morales, “esta semana tres diarios importantísimos, especie de sicarios en lo que se convierten a veces los periodistas, apuntaron a este periodista. Magneto, Fontevecchia [Jorge, director del diario Perfil] y La Nación. Lo que han mentido esta semana supera sus propios récords”.

De acuerdo con Morales, que es columnista deportivo de La Nación y lo fue hasta hace pocos meses del diario Perfil [antes de pasarse a Tiempo Argentino, del empresario kirchnerista Sergio Szpolski, “tres diarios en sus tapas, en sus notas interiores y en esa basura de los foros que tienen en las páginas digitales en las que anónimamente se dicen las peores porquerías. Esa debe haber sido la mentalidad de un torturador, el que no se sepa quién es para hacer lo que se quiera con una persona. Les quiero agradecer de una manera muy especial lo que me han dedicado. La semana empezó con una tapa de La Nación que fue muy comentada, que en potencial puso también que Bajada de Línea podría estar involucrada, el artículo tuvo derivadas, porque luego publicó mi respuesta, puso Fulano se despega del gobierno, y la malicia es extraordinaria. Yo no tengo que despegarme de nada porque el programa no tiene nada que ver con el Gobierno. Luego está ese pozo negro de los comentarios en Internet”.

De acuerdo con el relato de Morales en su propio programa, “con la foto de quien les habla, sin decir, siempre con el potencial, se fue creando la sensación que uno también está dentro de la protección económica del gobierno. En realidad a Magnetto lo entiendo, le quitaron el robo del fútbol, le anularon la ilegal Fibertel, le anularon medios con la Ley de medios, puede ir preso por Papel Prensa, por el robo de bebés que pasaron a sus brazos [en referencia al caso de los hermanos Noble Herrera, que se tramita en la Justicia y aún no ha tenido definición], digitaba todo desde las sombras, y ahora no puede ir ni a un restaurant de gente común. Al que me cuesta menos [probablemente Morales haya querido decir más] entender es a Fontevecchia. Fontevecchia, que es adicto a la psicología, anda por los pasillos del subconsciente o del preconciente permanentemente en sus notas, está muy afectado porque él se peleó fuerte con Magnetto cuando publicó aquella tapa en la que decía que tenía cáncer. Felizmente, Magnetto se ha recuperado, pero en el momento le provocó tanto desprecio que naturalmente se desató una guerra. No obstante, lo cual Fontevecchia, acechado por los fantasmas del subconsciente o del preconciente, no sabe cómo pedirle disculpas a Magnetto, le dice que lo protege, que está con él, que están juntos en la pelea con el Gobierno”, argumentó.

Al final, Morales cerró su explicación en Bajada de Línea apuntando contra los periodistas. “El mismo periodista que escribió la nota involucrando a Bajada de Línea, permitiendo que Clarín diga que somos periodistas comprados, quizá porque compraron todo, y La Nación aprovechando la coyuntura, quiera despegarse en esta extensa nota del periodista que dio a esta semana de mentiras su principio. En toda la nota, muy extensa, no aparece mencionado jamás ni Bajada de Línea ni quien les habla, aquello les había servido para la inmundicia. Sabe este joven periodista cómo gratifican a sus superiores los condicionales, los potenciales [El joven periodista vendría a ser yo ¡gracias Víctor Hugo por el piropo!]. Les vamos a dar pelea. Seguramente vamos a perder, esta semana inventarán alguna otra historia, el domingo estaremos aquí y estaremos todos los días en Continental, les vamos a dar pelea, vamos a perder y después que nos quiten lo bailado”, afirmó.

7 de enero. “Me da mucha vergüenza haber sido parte del ejército mediático [contra Kirchner]”
El 7 de enero, tras la publicación el día anterior en el diario Clarín de una nota que recogía críticas y denuncias de políticos de la oposición en referencia a la distribución arbitraria de la publicidad oficial en TV, Morales utilizó su programa deportivo, Competencia, a anticipar lo que ayer finalmente se produjo en su envío televisivo.

“Magneto tiene las manos entraschadas de sangre en cuanto a la apropiación de Papel Prensa y de los bebes de desaparecidos. Y están los pobres esbirros periodísticos, la soldadesca infame que lo acompaña. Es lógico que Clarín aprovechase la movida de La Nación sobre publicidad oficial y me pusiese a mi en la foto, pero no hay nada que puedan decir. Les ofrezco a cuatro o cinco oyentes ser parte de una comisión ética que venga y mire mis resúmenes, mis cuentas, lo que recibo del programa, que conversen con los 15 compañeros que trabajan en Bajada de Línea, de los que estoy orgulloso. Magnetto es Magnetto y la gente no espera nada de él. Yo tengo que venir a la radio y en Bajada de Línea y tengo que mostrarme ante mis compañeros. Y de paso vamos a hablar de Fontevecchia que ha tenido la delicadeza de en su condición de perrito faldero de Magnetto de elegirnos casi como un elogio de miserables periodistas [en relación a la designación que la revista Noticias hizo de Morales como el peor periodista de 2010]. Son miserables porque son víctimas”.

Tras estas acusaciones, y aunque la de la tarde es la audiencia deportiva, Morales se extendió 40 minutos en explicar su abrupto cambio de posición respecto del gobierno. “Es verdad que he sido muy crítico del gobierno, una vez les quise poner al aire una cinta y la quité porque me daba vergüenza y luego pedí disculpas. [en referencia a la vez que criticó la compra de dólares por parte de Néstor Kirchner, que lo llamó personalmente para explicarle que esa inversión tenía que ver con la compra de una propiedad en El Calafate. Tras esa conversación, Morales se disculpó al aire]. En diciembre de 2007, cuando se firmó la fusión de Cablevisión y Multicanal estuve muy enojado con el gobierno. Después vino lo del campo, dos o tres meses después, y uno se maneja con los enojos. Uno es una pobre persona de vez en cuando y el enojo por nuevamente hacerle el gusto a Clarín con Cablevisión y Multicanal, y toda esa gente que no paró de robar en cada momento de su vida. Además, nos pareció que no es correcto tratar igual a los desiguales, en un tema que no dominamos [el del campo], que duró un año y pico era interminable, estaban las notas y la ironía, es verdad”.

Según Morales, su cambio de posición se produjo en un momento preciso. “Hubo un momento en el cual este gobierno estatizó las AFJP, y yo soy una persona tirando a la izquierda, al progresismo, aunque la palabra progresista sea indefinible. Eso me hizo bien y esto fue anterior a la ley de medios y el fútbol para todos. Eso me permitió salir de la trampa del odio que a uno lo va ganando en la que estaba inmerso en la discusión del campo. Después vino el futbol para todos y la ley de medios y una serie de medidas que para cualquier persona más o menos de izquierda le van gustando y me fui quedando con pocos elementos para quedar en la vereda de enfrente de la del gobierno.”

“A mi me da mucha vergüenza haber sido parte del ejército mediático que se sumaba por otros motivos contra el gobierno. Me sume sin darme cuenta a los que quieren el país sólo para ellos, que no quieren repartir la bonanza, que quieren todo para ellos y para los pobres nada. Me da vergüenza del discurso del que a mi manera y por mi lado de lo que había participado”, agregó.

5 de enero: “La investigación podría perfectamente ajustarse a la verdad”
El 5 de enero, en su programa La Mañana, Morales se refirió “a dos notas” publicadas en La Nación, a las que calificó de “mi regalito de Reyes”. En referencia a la primera, la que dio las cifras de distribución de la pauta oficial en TV, afirmó que “es una investigación que puede ser perfectamente compatible con la verdad” (http://www.lanacion.com.ar/1338884) e inmediatamente tomó distancia del Gobierno. “Nunca ha sido demasiado clara ni aprobable la forma en que el Gobierno ha invertido sus dineros”, afirmó.

Afirmó además que no puede pensarse que su ciclo reciba más publicidad oficial “cuando advertís que los que se van molestos por el reportaje pueden ser Moyano o Boudou o que van Alfonsín, Macri o Pino Solanas y dicen absolutamente todo lo que quieren, prácticamente sin repreguntas, porque se sabe que yo soy abiertamente respuetuoso de lo que dice el entrevistado y no lo llamó para discutir ni para ser más inteligente que él”.

En referencia a la segunda nota, Morales cargó contra el periodista Pablo Sirvén. “Pienso de Sirvén lo peor que se pueden pensar de algún tipo de persona pero no voy a caer en los exabruptos que a veces a uno íntimamente tendría deseos de pronunciar. Hay de su parte una malicia, una especie de acoso sesual –ojo que es con ese- persistente, continuado, obstinado en llamar converso a quien puede darle explicaciones de cada paso que ha dado en su vida periodísticamente”

En este comentario sobre el tema, Morales también reconoció que el único tema que acordó evitar con Canal 9 “es el de Ibope” [la medidora de audiencia de TV] porque, según explicó “ellos [el canal] tienen una relación con Ibope que va más allá de un programa y se extiende a toda la programación y quieren seguir teniéndola”.